Foto: David Benito
Si alguien se encuentra al Idiota a la salida del laberinto, no puede menos que quedarse sorprendido de su sonrisa: una extraña sonrisa que se escapa de todo su rostro blando y luminoso; una sonrisa a punto de desprenderse para irse por su cuenta y de convertirse en algo así como una paloma.
EL IDIOTA, María Zambrano
María Zambrano dedica un texto breve e inmenso al retrato del Niño de Vallecas pintado por Velázquez. La pensadora describe en él la figura del idiota, un modelo de desposesión y alegría que vive en un acuerdo estrecho con la realidad.
El idiota hace sin juicio, vive entre las cosas sin más, sin preocuparse por su sentido. El idiota se deja iluminar por el sol, respira y vive deslumbrado por el instante y no por su posesión. En este escrito Zambrano hace apología de una sabiduría no intelectual, no discursiva, que se aloja en el cuerpo y en sus sentires.
Cautivadas por este idiota, que deshace con su mirada cada una de las categorías sobre las que construimos nuestra identidad y nuestra idea de felicidad, queremos dedicarle esta obra. Queremos habitar ese cuerpo que no conoce la línea recta, que va como bailando de acá para allá, ese cuerpo que no posee, ni siquiera, el espacio que ocupa, ese cuerpo que parece que cayó de la luna.
En escena: Elena Córdoba, Clara Pampyn y Luz Prado, Alejandro Rojas Marcos. Creación sonora: Luz Prado con Alejandro Rojas Marcos y las voces de Clara Pampyn, Jesús Rubio Gamo, María José Pire y Elena Córdoba. Espacio escénico e iluminación: Carlos Marquerie. Diseño de vestuario: Naldi Fernandes y Carlos Marquerie. Realización de vestuario: Naldi Fernandes. Documentación: David Benito. Sonido: Pablo Contreras. Dirección técnica: Cristina Libertad.
Estreno el 6 y 7 de febrero en el Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque.
El idiota se ha creado en coproducción con el Centro de Cultura Contemporánea Conde Duque, la Ayuda a la creación contemporánea del Ayuntamiento de Madrid, y la colaboración del Centro de creación Los Barros.