Imagen de Susana Paiva
La primera vértebra de la columna, la que sujeta la cabeza, se llama Atlas, igual que el gigante al que castigó Jupiter a sujetar el cielo para que no se desplomara sobre la tierra.
Atlas, el gigante y la vértebra nace del paralelo entre el Titán castigado a sujetar el cielo, y esa vértebra (diferente a las demás) que está dentro de la cabeza y que la sujeta. El trabajo de los dos Atlas es mantener la división entre el cielo y la tierra, entre la carne y el pensamiento, y ese trabajo, principio del orden, es una tarea agotadora que no tiene límites.
Vestida de Atlas a mis 50 años, construí una ficción donde me imaginaba que podía sujetarlo todo o donde todo me aplasta. Una ficción que me acerca al momento en que el esfuerzo de mi cuerpo vaya siendo mayor que sus fuerzas. Atlas, como muchas de las ficciones que he construido a través del cuerpo, me permite bailar con aquello que me da miedo.
Atlas, el gigante y la vértebra es una obra para una bailarina sola con una película de Chus Dominguez a modo de epílogo.
A mi padre Joaquin Córdoba, un coloso
Estrenada el 23 de noviembre en Teatro Pradillo de 2012. Atlas: Elena Córdoba - Epílogo: Chus Dominguez - Luz: Carlos Marquerie - Colaboración técnica: David Benito - Fotografía: Susana Paiva - Documentación en vídeo: Hugo Barbosa y Pamela Gallos - Música: Andante de la Sinfonía nº 40 en Sol menor KV 550 de W. A. Mozart en la dirección de Sergiu Celibidache y Sarabanda de la Suite Francesa nº 5 en Sol Mayor BWV 816 en la interpretación de András Schiff - Dirección: Elena Córdoba.
Elena Córdoba fue artista residente en Teatro Pradillo y Atlas, el gigante y la vértebra uno de los proyectos que albergó este teatro. Esta obra recibió el apoyo de Citemor 2012 Festival de Montemor-O-Velho en Portugal y la ayuda de la Consejería de Cultura de la Comunidad de Madrid